Descubre todo lo que debes saber sobre las elecciones democráticas, donde los ciudadanos ejercen su poder político de forma libre y mediante la participación de representantes que se enfrentan en una contienda electoral a fin de asumir un importante cargo dentro del gobierno de su nación, precisamente en nombre de los militantes de su partido y gracias al apoyo de los mismos.
¿Qué son elecciones democráticas?
Por un lado, es preciso indicar que las elecciones constituyen un proceso de carácter institucional creado para brindar a los participantes el derecho a elegir las autoridades gubernamentales a cargo de los diferentes cargos políticos, siendo en este caso el término utilizado para identificar la forma de gobierno en que puede ser ejercido el poder político.
De forma más clara, son elecciones democráticas cuando se respeta el derecho y libertades de las personas, se les brinda la oportunidad de elegir mediante el voto directo y secreto a todas aquellas autoridades que consideran aptas para estar al frente del gobierno de su país.
Aunado a esto, con el término democracia se visualizan muchas otras oportunidades más allá de la perspectiva electoral, pues se brinda calidad de vida con igualdad de oportunidades para todos, dentro de un ámbito rodeado por el respeto, la tolerancia y convivencia armoniosa de diferentes tendencias políticas y más.
Al hablar de elecciones democráticas se hace referencia a un sistema de gobierno dentro del cual los ciudadanos tienen derecho a exigir cuentas a sus gobernantes en materia de actos de dominio público, lo que hacen efectivo a través de la cooperación y participación de todos sus representantes electos y aun sin que ellos cuenten con un cargo, gracias a la presencia de los partidos políticos.
De hecho, se observa que dentro de los países democráticos muchas decisiones son sometidas a figuras como el referéndum o plebiscito para situaciones dentro de las cuales las elecciones no inciden directamente; no obstante, se trata de situaciones desgastantes que son adoptadas con el fin de minimizar los conflictos de intereses entre gobernados y gobernantes.
Otro factor de suma importancia es que las elecciones democráticas brindan a la ciudadanía la posibilidad de elegir sus gobernantes dentro de los candidatos representantes de su partido de preferencia y gana el que alcance el mayor número de votantes dentro de los postulados para un cargo específico.
En este caso los procesos electorales son la fuente de legitimación de las autoridades públicas de una nación y la representación de la aceptación mayoritaria de todos los gobernados presentes en una nación.
Con el surgimiento de las elecciones democráticas se han dejado de lado muchas razones de fuerza militar, riqueza, abolengo familiar y poderes mágicos para hacerse cargo de la jefatura de un país, pues sencillamente se trata de un privilegio que solo es alcanzado legítimamente tras un proceso transparente de votación.
Para reconocer una elección democrática solo es preciso establecer que se trata de una votación dentro de la cual participan todos los electores de un país, quienes ejercen este derecho sin cohesión y de forma voluntaria.
Su acto es caracterizado por la realización de un sufragio universal, secreto en igualdad de condiciones para todos y cuyo proceso es seguido de cerca por todos los representantes de los partidos políticos y actual gobierno.
Cada votante debe sentirse orgulloso de emitir sus deseos durante este acto y confiar en la integridad y transparencia del escrutinio, dentro del cual se llevarán a los cargos políticos a todos aquellos representantes que cuenten con mayoría de votos en las urnas y que, en virtud de una democracia, deberán ser aceptados de forma unánime.
La democracia es vista en general como una forma de gobierno justa y adecuada para vivir en armonía; siempre que las autoridades competentes se aseguren de materializar los cambios solicitados por los ciudadanos mediante su voto.
